En caso de estar embarazada, si estás planeando un viaje con destino internacional, es fundamental que tengas la protección de una asistencia de viaje para embarazadas, de ese modo tendrás toda la protección necesaria ante cualquier inconveniente con tu estado.
El viajar estando embarazada implica tomar recaudos fundamentales. El primer punto es tener el visto bueno de tu médico, ya que solamente ese profesional podrá decidir si tu estado clínico y gestacional permiten la realización del viaje. Contando con ese visto bueno, deberás estar atenta al período del viaje, que deberá ser previo al séptimo mes de embarazo.
Todas las aerolíneas cuentan con determinadas reglas, que en algunos casos no son las mismas, pero en lo que se refiere al embarque de mujeres gestantes, la autorización es hasta la 28° semana de embarazo en todas. Posteriormente sólo podrás viajar con la autorización de tu médico, teniendo en cuenta que podrá ser hasta la 35° semana de embarazo. Las compañías aéreas no autorizan el embarque con más de 35 semanas debido a la posibilidad de un parto inminente y la obligación, en ese caso, de tener que hacer un aterrizaje de emergencia. Preservan, de este modo, tu salud y la de tu hijo, y la seguridad del vuelo.
Ahora bien, si viajarás en tren, en coche u ómnibus, dependerás siempre de la autorización de tu médico por las horas de viaje. Y tendrás que tener en cuenta que, en cualquier medio de locomoción, será fundamental que te levantes y camines. De ese modo, facilitarás la circulación sanguínea. Aprovecha cada parada del ómnibus o del auto para bajar y estirar las piernas. En el tren o en el avión, los corredores permiten que camines un poco.
Lo que no podrás dejar de lado de ninguna manera es una asistencia de viaje que tenga cobertura para embarazadas. Hay que tener en cuenta que cualquier imprevisto puede llegar a sorprenderte y, teniendo una asistencia podrás recibir atención inmediata, sin poner en riesgo tu embarazo.
Al adquirir tu asistencia de viaje, deberás informar sobre tu embarazo, controlando que tengas la cobertura adecuada a tu situación. Solamente así podrás recibir toda la asistencia que necesites ante cualquier imprevisto, incluyendo un parto prematuro. Preservarás de este modo tu salud y la salud de tu bebé.